de nominalismos

me has llamado Monica, Andrea, Advenediza y sabrá el futuro si rimare con nuevas mujeres, nuevos nombres, nuevas historias, donde tangenciales a mi mirada humana hipnótica se diluirán los olvidos, y te arañaran el destino como si así pudiera llegar a tu final- contigo.

me has llamado para dejarme, descubriendo el placer de lo infinito, el placer que tiene el nunca, de los juegos de sombras, de aquellos que estamos de sobra.

me has llamado y esta vez quiero quedarme, libre de cavilaciones confusas, ser libre en libertad, vestirme de músico para tocarte, peinarme entre tus dedos, y enredarme en tu vientre

me has llamado con esa facultad que tienes para alejarme, volviéndome victimaria en la inocencia, convirtiéndonos en pausas de ausentes, de entrar y salir, donde terminaremos desnudos luego de haber tirado la toalla.

me has llamado y sin embargo estoy ebria en mi setiembre de color, de miel, de calor, de sudor, de lágrimas de agonía, de este credo sagrado... por que ausente me has nominalizado pero no me enseñaste a interpretarme en tu nombre.

Gerundios malditos

Esta madrugada la ciudad se nos muestra pequeña, intima, donde barremos las cenizas con fuego, calumnias a las legañas con la tartamudez de tu letrero : "hambre", y escribes así la letanía cerebral de la ignorancia, de rostros simples, sonrisas fingidas, del otro sin verbo, y del verbo sin el nosotros.

Esta madrugada de dos, de tres, de cinco horas que quiebran esposas, y que de costumbre nos devolveran a los gerundios del pensando, reflexionando, inquietando lo que las plumas, los versos, las palabras , sus lenguas y lenguajes no nos darán como fruto, y quebrando leyes de gravedad se diluiran en los Bistrot de San Isidro, lo que dijimos callando... juguemos a reírnos del hambre, y a llorar por la muerte, maquillemos el acá, burlemos nuestras celdas, para que lejos el dolor de la ausencia volvamos a la cordura, hagamos catarsis de la furia, que desencanto tras desencanto, sumidos en la madrugada esta, en la que los hambres ajenos, duelen , duelen , duelen... de dos , de tres y de miles de personas en gerundios malditos, en sufriendo, en callando...

Despertar en tus manos

Y en esta hora desnuda, vamos copilando nuestros credos y vacíos teóricos, tejiendo los retazos de la vida en ofrenda a la muerte, sí la muerte que nos ha visto nacer una noche sin luna, una semana en el que las noches duran segundos, noches en las que dueles al apretarme la mano, mientras vas anudando las lineas que se se han borroneado en sus rutas, donde ya no existes, de donde me has dado vida.

Pero sueles encontrarte en mi anatomía, como si tus huellas incrustadas en mis pieles hubiesen encarnado alli , superando los limites naturales de mi costa, de mis olas, de mi barranco, y entre vocación y devoción me ahogas en el sueño de las lamparas de media noche, de juguetes conservados, de escotes tan profundos que lleguen al pulmón, y sin aire nos disolverán cuando duelas al apretarme la mano... cuando dejes de doler, abre despertado, despertado en poesía ...

en tus manos que hoy son poesía ...

...
Hand in glove
we can go wherever we please
and everything depends upon
how near you stand to me ...

CARTA SIN SOBRE --

Mujer:

¿Desde cuando estamos para estos trotes ... matutinos y esquimales?; hasta cuando las callejuelas nos romperán en tropiezos, y hasta cuando las miradas de inocencia se perderan con la humedad de los días , y los lunes dejaran de ser lunes, los martes dejaran de ser martes ...y los miércoles, antes q todos, dejaran de ser miércoles. ¿Y que dirían las señoras, con manteles bordados y discursos elaborados? si te vieran hoy , sin reloj, sin huidas, sin cerraduras ni cerrojos, con la libertad hecha mente, y el eco de mis ruegos aun en silencio, silencio que ata mi mirada a mi propia muerte, muerte creativa, cuando la polaridad de los colores se expanden , sin mas reproches .

Y que diría el cielo, si arrojado al precipicio... nos perdemos en azul,

y cómo lloraremos al viento, si tu purpura cantando a la luna ... desapareciese

y tus labios nos inclinen al fuego, y en su propia historia, pierda los detalles de un rojo que amalgama nuestras piernas y nos deja al azar escoger sus matices....naranjas ..rojos...anaranjados

mujer...como así, entre tantos matices , elegiste el anaranjado de misterios soleados ...

Cartas sin sobre -

Hombre:

Nada nos ha quitado el complejo de pensar, y se va fundiendo en nuestros cuerpos sin letras, sin historia, pero con símbolos con aroma a infinito, y son nuestros vértices con alas que nos han rescatado de las cenizas al aire, de mutuas expulsiones, de utopías apátridas, de fulanos del olvido. Nada, hombre, nada. Y a pesar de darnos la contra, de subconscientes que van renunciando a sus defensas, y con mayúscula me doy cuenta que algo se va destilando, denso, cálido y jugoso...

Ahora mi cabeza burbujeante, ha encontrado tu pepa de calabaza, y nos iremos disolviendo toujours ... en esta lluvia que esconde un descuidado secreto de ternura, sonámbula de trotes espontáneos, de melodías inquietas que juguetean a ser parte de tus cejas, donde también la dulzura neva, neva tu azul, tu azul ya no me niega.


G.


pd. El azul del viento se nos ha hecho sangre en los pensamientos.